Una ciudad sitiada: Sderot, Israel, vista desde dentro

La labor de periodista me lleva a muchos lugares de este país, pero mi lugar de trabajo más reciente, en una ciudad llamada Sderot, es tal vez el que más evoca el recuerdo de haber crecido en Calais (Maine, EE.UU.). Al igual que mi ciudad natal, esta población situada en la frontera sur de Israel tiene una sala de cine, varias escuelas y una oficina de correos que constituye el centro social del cotilleo y las noticias.

Sin embargo, a diferencia de la vida tranquila y pacífica que llevábamos en Maine, los 20.000 habitantes de Sderot viven en una atmósfera muy diferente, y por eso estoy aquí.

Como Sderot está a menos de 2 km de la Franja de Gaza, donde los terroristas de Hamás y Fatah disparan constantemente cohetes Kasam hacia el área del Néguev Occidental, los habitantes soportan desde hace siete años la aterradora realidad de los cohetes lanzados diariamente contra su ciudad. Sobre las actividades más elementales, como preparar una parrillada al caer el sol, hacer las compras en el supermercado o llevar los niños al colegio, se ciernen la amenaza y la presencia misma de los mortíferos cohetes.

Aun dentro de Israel, el ciudadano promedio no tiene idea de lo que pasa en Sderot detrás de los titulares. La radio y los periódicos sólo emiten informes diarios de los impactos y de que no hubo víctimas en Sderot ni en los alrededores. Sólo cuando se informa desde Sderot, uno se da cuenta de que el daño real del cohete Kasam no es necesariamente el número de personas muertas o heridas, sino el trauma psicológico que provoca en las familias y en los niños.

La primera experiencia que presencié al respecto fue durante una visita a la familia Dahan de Sderot. La madre, Yehudit, empezó diciendo que no permite que la familia duerma en el piso superior de su hermosa casa, relativamente nueva. “Por la noche tendemos colchones en la sala, para estar lo más cerca posible del refugio que tenemos en casa. Mi esposo y los niños están viviendo así desde hace unos seis meses”.

En mayo de 2007, Sderot sufrió un impresionante aumento en la cantidad de ataques, con centenares de cohetes Kasam cayendo sobre la ciudad en un período de dos semanas. La intensidad y frecuencia de los lanzamientos provocó una semi-evacuación de la ciudad y desde entonces la población sigue reduciéndose. Según la Oficina Central de Estadísticas de Israel, cerca de 4.000 residentes han dejado Sderot en los últimos cuatro años.

Como Yehudit Dahan, son muchos los habitantes que sueñan con irse a otro sitio, pero no pueden hacerlo por motivos financieros. “Yo me iría en un momento”, dice Yehudit, “pero nadie querrá comprar esta casa”.

“Más aun”, agrega, “yo crecí aquí y viví aquí casi toda mi vida. Amo a esta ciudad, es nuestro hogar, pero no puedo seguir criando a mis hijos en este entorno”.

Otro factor que incrementa la angustia y el temor de muchos padres en Sderot, como Yehudit, es que no todas las escuelas están adecuadamente protegidas contra los impactos de cohetes. “Sólo sé que mis hijos están seguros cuando los tengo en casa conmigo” dice ella. “De otro modo, me siento como un animalito indefenso, incapaz de proteger a mis niños contra los cohetes. Lo peor es no saber si los niños están seguros cuando cae un cohete”.

En efecto, en septiembre pasado, el año lectivo se inició en Sderot con nueve ataques de cohetes, entre ellos un impacto en el patio de una guardería. Los atacantes sincronizan los lanzamientos por las mañanas, a la hora en que los padres llevan a los niños al colegio. Doce de los pequeños de la guardería entraron en estado de shock y tuvieron que ser hospitalizados. Los padres que llegaron desesperados al lugar, unos minutos después, también quedaron alelados y sin poder creer en lo que veían.

Si bien el sistema de alarma instalado por la municipalidad de Sderot suena cuando se dispara un cohete, los 15 segundos que tienen los habitantes para entrar en un refugio no hubieran sido suficientes para poner a salvo a los niños y al personal de la guardería si los cohetes hubieran hecho impacto en el edificio mismo. Hasta la fecha, centenares de habitantes de Sderot han sido heridos y diez han muerto como consecuencia de estos ataques.

En Sderot, crispados residentes sólo esperan que haya pronto una intervención gubernamental o militar, porque esta gente traumatizada ya no puede confiar únicamente en los milagros.

Anav Silverman hizo aliá desde Maine (EE.UU.) en 2004. Trabaja en el Sderot Media Center y estudia en la Universidad Hebrea de Jerusalén y en la Universidad Bar Ilan de Ramat Gan.

Grupos de terroristas palestinos en Gaza

• Desde que Hamás asumió el control de la Franja de Gaza a mediados de junio de 2007 hasta junio de 2008 (un año) hubo 1508 ataques con cohetes y 1799 ataques con granadas de mortero dirigidos contra poblaciones dentro de Israel. Los cohetes de Hamás están pintados de rojo y verde.
• Jihad Islámico Palestino es una organización asociada con el Jihad Islámico Egipcio y probablemente financiada por Jezbolá, Siria e Irán. El brazo armado del Jihad Islámico, la Brigada Al-Quds, lanza cohetes regularmente contra Sderot y el Néguev Occidental. Esta organización produce los cohetes Kasam Al-Quds (modelos 1, 2 y 3), identificados por los colores rojo y amarillo.
• Brigadas de mártires de Al-Aqsa, el brazo militar armado del partido Al Fatah al que pertenece el Presidente de la Autoridad Palestina Mahmoud Abbas, suele lanzar cohetes contra Israel. En febrero de 2008, esta facción terrorista llevó a cabo un atentado suicida en la ciudad meridional israelí de Dimona. Sus cohetes son amarillos con inscripciones en árabe. El Departamento de Estado de Estados Unidos ha declarado que las Brigadas de mártires de Al Aqsa son una organización terrorista.

Impacto de la artillería de cohetes en poblaciones israelíes: Sderot y el Néguev Occidental

Sderot tenía hasta no hace mucho 24.000 habitantes, pero en la actualidad se estima que tiene una población de 17.000 a 19.000 almas. Las siguientes áreas han sido considerablemente afectadas por siete años bajo el fuego de artillería de cohetes.

• Seguridad

• El Gobierno de Israel ha instalado un sistema de radar que proporciona a los residentes una “alerta roja” en el momento en que se lanza un cohete, pero éste proporciona sólo 15 segundos para encontrar refugio y no es fiable en días fríos o lluviosos. Tampoco es capaz de detectar disparos de granadas de mortero. Según el portavoz de las Fuerzas de Defensa de Israel (Tzáhal) en el transcurso del año 2007 se lanzaron 2.000 cohetes Kasam desde la Franja de Gaza contra Sderot y poblaciones del Néguev Occidental.

• Salud mental

• En el Centro de Salud Mental de Sderot se han abierto unas 3000 fichas clínicas de pacientes afectados por la artillería de cohetes. Sólo en el transcurso del año 2007 se iniciaron 1117 fichas nuevas, un significativo aumento en comparación con 2006.
• Durante el último año y medio se informó de más de 1600 casos de estrés.
• Cerca del 70% de los habitantes de Sderot presentan síntomas del trastorno de estrés postraumático (TEPT), entre ellos agudas manifestaciones de estrés y angustia.
• Según un reciente informe de NATAL (Centro Israelí de Trauma para las Víctimas del Terrorismo y la Guerra), el 28% de los adultos y el 30% de los niños de Sderot están afectados por el trastorno de estrés postraumático (TEPT). En el estudio de NATAL se halló también que del 70 al 94% de los niños de Sderot manifiestan síntomas del TEPT.
• Mientras tanto, y debido a que hay sólo cuatro psicólogos que trabajan en Sderot, muchas víctimas de traumas no reciben ningún tipo de atención psicológica, o la que reciben no es suficiente.

• Economía

• Según informa un agente inmobiliario de Sderot llamado Yaacov Levy, los precios de los inmuebles se han reducido en un 50%. En el año 2000, antes de que se iniciaran los ataques con cohetes, los precios de la vivienda eran de casi el doble de los actuales.
• Del 20% al 30% de los comercios de Sderot y alrededores han cerrado sus puertas desde que se iniciaron los ataques. Las ventas en las tiendas, en general, demuestran una caída de cerca del 50%.
• Durante los ataques intensivos de mayo de 2007 se cerraron 350 pequeñas empresas. En enero de 2008, la fábrica de colchones de la multinacional Hollandia, que empleaba a un centenar de residentes de Sderot y alrededores, se vio obligada a trasladarse de Sderot al centro del país por efecto de los cohetes.

• Educación:

• Sólo cuatro de las escuelas de Sderot están bien protegidas contra la artillería de cohetes. Durante el año pasado, 1100 alumnos han pasado a otras escuelas fuera de Sderot.
• Se observa un descenso en las calificaciones obtenidas en los exámenes, junto con un incremento de la violencia escolar.

Una amenaza creciente

Según el Ministro de Seguridad Interior, Avi Dichter, el número de ciudadanos israelíes que viven bajo la amenaza real y actual de ser atacados con cohetes ascendía en diciembre de 2007 a 250.000.

Ciudades densamente pobladas como Ashkelón, Netivot, Ofakim y Kiryat Gat están dentro del radio de acción de los cohetes Grad y Katyusha.

El Centro de información de Sderot para la zona del Néguev Occidental brega por despertar la conciencia de la sociedad israelí y de la opinión pública mundial acerca de esta intolerable realidad que impera en el Néguev Occidental y en la ciudad de Sderot en particular. El Centro acompaña a la población civil en su incesante inquietud al tratar de llevar una vida ‘normal’ bajo la rutina diaria del lanzamiento de cohetes contra sus hogares en los últimos siete años. Por el momento, el Centro de información de Sderot es la única organización independiente de noticias que funciona en Sderot y refiere las facetas humanas de lo que deben soportar estos habitantes bajo el asedio de los terroristas. El Centro se ha convertido en una eficaz y única fuente de información para la prensa extranjera, oral y escrita, y para todo los grupos que visitan Sderot y el Néguev Occidental.